El año 2020 ha sido entre otras muchas cosas un gran maestro, nos enseñó cosas nuestras que no recordábamos que estaban ahí.

Dentro de la oleada de cambios que está provocando la crisis del coronavirus en el mercado de la vivienda está el impulso de las operaciones en las que los compradores adquieren los inmuebles sin visitarlos. 

Marcado por la Nueva Ley Hipotecaria, el 2019 fue un año que cerró con cifras positivas la compraventa de propiedades aún estando por debajo de 2017 y 2018.

El teletrabajo y el confinamiento en viviendas sin terrazas o espacio exterior, impulsan la búsqueda de casas más grandes lejos de los centros urbanos o en áreas rurales, todos quieren ganar metros cuadrados y calidad de vida.

El Real Decreto Ley 11/2020, de 31 de marzo contiende un conjunto de medidas destinadas al apoyo al alquiler de personas vulnerables.

Era una tendencia en alza desde hace un par de años, pero la situación actual por la crisis del Coronavirus lo ha convertido en unas pocos días en una realidad a marchas forzadas: la compraventa y alquiler de forma virtual es una opción cada vez más común. 

Ante la situación de emergencia sanitaria global causada por el COVID-19, y la declaración de estado de alarma, los grandes tenedores de viviendas (fondos de inversión y bancos) pondrán en marcha una serie de medidas orientadas a aquellas familias que se han visto afectadas económicamente por el estado de alerta.